Ahora que estamos en verano y que nuestro tono de piel es más tostado nos favorecen colores claros y tonos pastel. ¡Apuesta por un look total white y serás la más chic del lugar!

El blanco inunda nuestro armario sin importar tejidos ni estilos. Desde el clásico vestido ibicenco de algodón para una tarde de chillout, hasta un traje de chaqueta blanco nuclear para una cena de empresa.

Utiliza la combinación que prefieras: pitillos y top, falda con blusa, monos… lo importante es que el blanco sea el color estrella del outfit. Si te atreves, puedes darle un toque original añadiendo color en el bolso, los pendientes, el cinturón o los zapatos.

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