Ya el invierno pasado vimos cómo los 90 volvían para hacerse hueco en nuestros armarios de nuevo. Sin embargo, si hace un año se notaba especialmente en los cortes, patrones, y combinación entre prendas, este año son los estampados los que toman el relevo para hacernos viajar en el tiempo.
El peculiar estampado arty de aquella década ya ha tomado la calle, o los jerséis de punto para ser más concretos. Eso sí, cuanto más gruesos sean, mejor. Esta tendencia tiene una gran ventaja, y es que combinarla es fácil: un pantalón o falda de un color neutro y liso y no puedes fallar.
Además, hay una cosa que nos encanta de estos estampados y es que ¡tienen muchísimo potencial para la reutilización! Piénsalo, puedes rescatar un jersey de tu armario (¡o del de tus padres! 😉 ) o de cualquier tienda vintage o de segunda mano y ¡voilá! Y lo mejor de todo es que como el oversize sigue estando de moda, ¡puedes usarlos de mujer o de hombre!
Y tú, ¿te animas con esta tendencia?